El guardián entre el centeno de J. D. Salinger:
Las peripecias del adolescente Holden Cauldfiel en una Nueva York que se recupera de la guerra influyeron en sucesivas generaciones de todo el mundo. En su confesión sincera y sin tapujos, muy lejos de la visión almibarada de la adolescencia que imperó hasta entonces, Holden nos desvela la realidad de un muchacho enfrentado al fracaso escolar, a las rígidas normas de una familia tradicional, a la experiencia de la sexualidad más allá del mero deseo.
Tiene un lenguaje fascinante, agudo, crítico, divertido y, para la época en que
se publicó, absolutamente escandaloso.Alusiones a la sexualidad de
los jóvenes, los tacos, las críticas al modo de vida de la época y a su
hipocresía....
¿Qué significa hacerse mayor? Adquirimos responsabilidades y somos dueños de nosotros mismos. Se nos ha ido hurtando el placer de jugar. En algún sitio parece estar escrito que los adultos debemos ser serios y respetables antes que originales y divertidos. ¿Es posible recuperar esa parte de la infancia? La protagonista de esta historia se ve inmersa en una aventura que descarrila su ordenada vida. Perdida en el pulcro paisaje de un lugar llamado Raspajo de la Sierra, se dará de bruces con las caricaturas de tan esforzada respetabilidad, para descubrirse con el coraje y la alegría de una niña. De vuelta a su realidad cotidiana intentará encontrar la pista para comenzar a vivir sin las alas cortadas. Un relato de misterio y suspense, un cuento de hadas contemporáneo para quienes no renunciamos a seguir creyendo en ellos. Una novela de desaprendizaje donde no hay espacio para los milagros, sí para la esperanzada fantasía de lo posible.